¿Cómo hacer que mi viaje a Sicilia sea un éxito?

Aquí en Sicilia no hay que andarse con rodeos. En Palermo, prueba las pane e panelle (un bocadillo con frituras de harina de garbanzo acompañadas normalmente de berenjena frita y limón), los rollitos de pez espada (Involtini di pesce spada), sazonados con tomates, olivas y alcaparras; o incluso la pasta con sardinas, que se elabora con pasas, piñones, cebolla e hinojo. En Catania, no te puedes ir sin probar la pasta alla norma, con berenjena, tomate, albahaca y ricotta (requesón). El nero siciliano es una raza de cerdo exquisita de la región. Y si eres amante del queso, prueba el provolone, típico de la costa tirrena. Si no, los arancini son una especie de croquetas elaboradas con pasta de arroz, azafrán y un relleno muy variado que depende de los gustos de cada cual. ¿Y cómo no dedicarle unas palabras a la granita? Se trata de una especie de sorbete más ligero que los granizados españoles. También puedes probar la cassata siciliana, una tarta helada con chocolate, pistachos, requesón y fruta confitada. ¡Una delicia!

Lipari es famoso por su mar turquesa y su vegetación repleta de flores y limoneros. Vulcano te ofrece una experiencia única gracias a sus baños de lodo, situados en piscinas naturales. Además, la senda que te lleva al cráter del volcán te brindará unas vistas espectaculares. Panarea recuerda un poco a la típica isla griega, con una capa de casas blancas y unas playas de agua cristalina donde el sol deja un abanico de colores. Y, por su parte, la isla de Stromboli (o Estrómboli) te reserva una sorprendente playa de arena negra. La ascensión al volcán por la noche es una experiencia inolvidable.

Ante todo, hay que ser consciente del esfuerzo y la dificultad que representa la ascensión al volcán. Esta subida está dedicada a los adultos, siempre bien equipados y sin problemas cardíacos, de articulaciones o de vértigo. ¡Solo los más valientes deben atreverse! Y sí, se puede subir al Etna o al Stromboli en cualquier época del año, aunque te recomendamos que no lo hagas en invierno, ya que las condiciones climatológicas pueden complicar el recorrido. Y, ¡no te confíes! En la cima, las temperaturas pueden caer en picado incluso en verano.

Un buen consejo es que te lleves unas gafas de protección UV, crema solar, calzado adecuado, guantes, agua y alimentos que contengan carbohidratos (pan, sándwich, galletas, barras de cereales) y azúcar, como el zumo de frutas. Para comenzar, lleva puesta una camiseta corta, tráete una sudadera o un anorak cuando para cuando alcances una cierta altitud.

Para los paladares más exigentes, el Marsala es un vino fortificado que debe consumirse fresco. No dudes en llevarte una botellita de limoncello, de licor de higo chumbo o un tarro de miel de la región del Etna. Si deseas llevarte un pedacito de cultura, en Palermo o Catania encontrarás magníficas marionetas, fruto de una larga tradición artesanal. Siracusa es el único lugar en Europa donde podrás adquirir papiro. Y, por supuesto, el gran clásico es el aceite de oliva, uno de los mejores del Mediterráneo.

- El viaje no es caro, y es un destino de fácil acceso,

- Cuenta con increíbles ciudades antiguas como Siracusa, Agrigento, Palermo o Taormina,

- Posee bellas playas,

- La ascensión al Etna ofrece espectaculares paisajes y rutas de trekking.

- La gran presencia de turistas durante los meses de verano. Intenta reservar tu viaje con antelación.