: los 0 lugares que no te puedes perder

Gracias a su numerosos vestigios y leyendas mitológicas, un viaje a Creta es como leer un apasionante libro de historia. Sumérgete en su pasado comenzando por la meseta de Lasithi, una inmensa extensión salvaje dominada por molinos blancos, un recorrido perfecto que te permitirá acceder a la gruta más famosa de la isla, ahí donde el mismísimo Zeus se escondió para evitar que su padre Cronos lo devorase. Pasa la página del libro y descubre el período minoico en el yacimiento arqueológico de Knossos y la ciudad de Heraklion. Continúa con la herencia veneciana y contempla los puertos de Rethymnon y La Canea. Salta algunos siglos y sumérgete en las calles hippies de Mátala, donde todavía se respira el espíritu happy-flower.
El patrimonio histórico y cultural de Creta también queda expuesto en sus diferentes museos, especialmente en el museo de arte religioso del monasterio de Preveli. ¿Te apetece descubrir la ínsula de otra manera? Explora los espléndidos paisajes que brinda su relieve montañoso. Las rutas de las gargantas de Samaria y Agio Farango te llevarán a los lugares más secretos. Si andas en busca de pequeños paraísos, la playa de arena rosa de Elafonisi o la laguna de Balos te invitan a un buen baño en sus aguas turquesas y transparentes. A pesar de la gran afluencia de gente, todavía se conservan zonas con encanto donde disfrutar de un buen paseo cretense, como ocurre en la ciudad de Agios Nikolaos o en Loutro, un pequeño pueblo pesquero del sureste de la isla. Tras esta aventura, te toca seguir escribiendo el libro.