¿Qué hacer en Canadá? 22 Ideas de actividades

¿Te apetece vivir una experiencia memorable e instructiva por el Saint-Laurent? Organiza un crucero y descubre las maravillas de Quebec: el castillo de Frontenac, la isla de Orleans, las cascadas de Montmorency o las montañas Laurentides. Disfruta de unas espectaculares vistas mientras escuchas la historia de la ciudad y el papel fundamental de la antigua capital durante el Virreinato de Nueva Francia.
Los cruceros salen del viejo puerto montrealés, y ofrece un panorama fascinante y único de los edificios de la ciudad.

¿Te apetece admirar uno de los espectáculos más majestuosos y bonitos de la madre Naturaleza? Este fenómeno tiene lugar de septiembre a marzo, durante las noches despejadas de nubes y bajo la luz de la luna llena. Su momento álgido se encuentra entre las 22 h y las 3 h. Para no perderte este gran tesoro, organiza una excursión nocturna con guía en Saint-David-de-Falardeau o realiza un circuito temático de varios días en Nunavut y Nunavik, organizado por una agencia autóctona. No te pierdas la única oportunidad de ser el espectador de esta hiptotizadora danza de colores.

Este efímero palacio tallado en el propio hielo permite a los amantes de las sensaciones fuertes vivir una experiencia de lo más helada. La obra de arte es de diseño único, con bóvedas de nieve y estatuas de hielo que aseguran una atmósfera mágica. Haz una pausa en el sublime bar de hielo, donde preparan ricos cócteles helados. Los más frioleros podrán pasar incluso una noche memorable en alguna de sus lujosas suites temáticas. ¡Algunas de ellas tienen hasta chimenea! El hotel ofrece visitas guiadas sin necesidad de reservar una suite. ¡No te lo pierdas!

Ver a los cetáceos evolucionar en su entorno natural es el sueño de cualquier persona que ame los animales en libertad, y es un deseo que se puede cumplir en Tadoussac o en Gaspesia.
Quebec también es conocido por sus alces, fácilmente observables en el corazón de los montes Chics-Chocs. En el zoo salvaje de Saint-Félicien conviven más de 75 especies a través de 485 hectáreas que puedes visitar en un tren protegido con rejas.
También existen otros centros de observación, como el Parque Nacional de Gaspesia o el Aventuraid en Saguenay, que alberga una de las joyas más fascinantes del país, el lobo. Puedes incluso pasar la noche en una tienda de campaña, acunado/a por el aullido de las manadas.

Montreal posee el mejor panorama gastronómico del norte de América después de Nueva York, y la prueba la puedes encontrar en cualquiera de sus lujosos restaurantes, donde se innova cada día con los sabores. Sin embargo, no hace falta gastarse un pastón para descubrir su espectacular cocina. Algunas especialidades pertenecientes a la comida rápida se han convertido en auténticos iconos de la gastronomía de la ciudad, como es el caso del sándwich de carne ahumada de Schwartz's, la poutine de La Banquise y Poutineville o los bagels cocidos en agua endulzada con miel preparados en Fairmount o Saint-Viateur. Esta etapa culinaria es imprescindible durante tu estancia en Canadá.

Sigamos en el mundo de la gastronomía montrealense. Disfruta de especialidades saladas típicamente americanas, como los huevos revueltos con salmón, bacon y las tradicionales alubias. Si eres más de dulce por la mañana, quizás tu apetito opte más bien por unas tortitas de arándanos y el ingrediente estrella: el sirope de arce. ¡A ponerse las botas!

¿Todavía no sabes cómo relajarte tras un intenso día de aventura? Regálate una experiencia única en alguno de sus baños termales y disfruta de un entorno único rodeado/a de paisajes nevados. Te recomendamos BotaBota y Scandinave Spa, unos auténticos expertos en la materia.

Admira el talento sobre hielo de los Montreal Canadiens, el equipo estrella de la ciudad. Asiste a un partido de hockey y sumérgete en un ambiente único que forma parte de la cultura nacional.

Si llevas en tu equipaje el espíritu más cervecero, no te pierdas las cervecerías canadienses, donde podrás saborear los matices más exquisitos del lúpulo. Su producción artesanal asegura cervezas de una gran calidad.
¿Eres más de café? En ese caso, dirígete al Mile End y al Plateau-Mont-Royal.