¿Cómo hacer que mi viaje a Haití sea un éxito?

La isla de Haití se encuentra al sureste de Cuba, entre el Caribe y el Atlántico. Este lugar puede parecer un destino turístico pobre dada su situación económica y los numerosos desastres naturales que han marcado su historia. Sin embargo, si te gustan los lugares poco frecuentados, preservados del turismo de masas y ricos en tradiciones, este destino merece una visita. El país está formado por imponentes montañas, bosques, cuevas, lagos y playas poco conocidas.
En Puerto Príncipe, la capital, aún marcada por el terremoto de 2010, se puede visitar el Museo de Arte de Haití, que alberga una gran colección de arte naif, así como el Museo del Panteón Nacional de Haití, que recorre la historia de Haití y honra a sus héroes, como Toussaint Louverture. También se puede pasear por el famoso Mercado del Hierro, construido a finales del siglo XIX y muy conocido por sus fachadas de colores brillantes.
Si quieres descubrir la artesanía haitiana, pon rumbo al pueblo de Kenscoff. Otra opción es visitar la ciudad de Cap-Haïtien para conocer su arquitectura colonial.
Los amantes de la historia podrán pasear por la ciudadela de Laferrière, que es la fortaleza más grande de las Antillas con unas impresionantes vistas de las montañas. Tampoco puedes perderte las ruinas del palacio de Sans Souci, donde podrás observar una magnífica arquitectura en un entorno muy verde. Estos monumentos se encuentran en el corazón del Parque Histórico Nacional, que se incluye dentro de la lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Sobre esta isla se cierne el misterio del ritual vudú, pero eso no quita que aquí se pueda degustar la deliciosa cocina local, cuyos platos e ingredientes estrella son las especias, los chiles, el ron, el bacalao, el colombo de cerdo, el pollo ahumado y muchas otras recetas típicas de la cocina criolla.