¿Cómo hacer que mi viaje a la Costa oeste sea un éxito?
¿Qué te evoca el oeste americano? Grandes extensiones desérticas, exceso, aventura, libertad... Es la América de los pioneros, de la búsqueda del oro, los vaqueros y las historias de indios y americanos que tanto nos siguen fascinando. Arizona, Nevada, el Colorado y otros muchos estados han servido de telón en los incontables westerns de Hollywood y que han contribuido a forjar lo que hoy conocemos como el lejano oeste. En la parte occidental de los Estados Unidos encostarás numerosos lugares y parques naturales, prestigiosas ciudades e innumerables tesoros.
El condado de la ciudad de Los Ángeles, la segunda ciudad más grande de Estados Unidos y última parada de la famosa Ruta 66, merece una visita debido a sus famosos edificios y ciudades como Beverly Hills, Santa Mónica y Hollywood. Visita la ciudad de San Francisco, con su hermosa bahía, pintorescas casas victorianas, colinas accesibles en tranvía, museos y tiendas. ¿Y cómo no realizar una parada en el icónico Golden Gate o en la famosa prisión de Alcatraz?
En este vasto oeste americano, no te pierdas el Parque Nacional del Gran Cañón, situado en Arizona. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, esta maravilla geológica ofrece impresionantes e inolvidables vistas. El otro lugar natural por excelencia es el Monument Valley, una gran depresión roja con impresionantes picos en pleno territorio indio.
El Parque Nacional de Yosemite es uno de los parques naturales más bellos de Estados Unidos. Se encuentra en Sierra Nevada, y deleitará a los amantes de la naturaleza por sus gigantescas secuoyas, sus impresionantes acantilados de granito y sus espectaculares cascadas.
No puedes dejar el lejano oeste sin hacer una parada en las Montañas Rocosas de Montana, con sus grandiosos paisajes salvajes. Explora también el árido territorio de Arizona, las playas de California, el Valle de la Muerte (Death Valley) en las Vegas y otros muchos lugares míticos que te harán soñar durante este viaje inolvidable.
¿Qué período elegir para viajar a la Costa oeste ?
Si deseas hacer un road trip por el oeste americano, te aconsejamos que lo hagas en primavera u otoño, pues gozarás de unas temperaturas más agradables y de una menor presencia de turistas. Si no te queda más remedio que irte en verano por las vacaciones y la familia, no olvides que mientras recorres sus parques naturales tendrás que soportar temperaturas que pueden alcanzar hasta los 40 °C e incluso los 50 °C en Death Valley.
¿Cómo ir a la Costa oeste?
¿Cuáles son los aeropuertos de llegada?
Elige el aeropuerto más próximo a tu lugar de alojamiento.¿Desde qué aeropuerto despegar?
Consulta los aeropuertos que proponen vuelos directos y calendarios de vuelos la Costa oeste.Respuestas a las preguntas más frecuentes
Calcula al menos 15 días para un road trip por el oeste americano. Si puedes, organiza un viaje de 3 semanas. De esta forma, podrás descubrir con más tiempo sus parques y quedarte al menos 2 días más en los que más te gusten. La distancia entre ellos es bastante considerable, y tendrás que estar al volante unas 3 horas de media al día. Eso sí, las horas pasan rápidamente, pues sus hermosos y variados paisajes guardan espectaculares y sorpresas por el camino. Tómate tu tiempo para admirar tanto tesoro junto. Elige el circuito que más se adapte a tus gustos, por ejemplo: ¿te apetece un viaje de trekking y senderismo? Haz menos kilómetros en carretera y disfruta a pie de sus paisajes durante más tiempo. ¿Viajas con niños? Tómate tu tiempo para que los más pequeños puedan disfrutar de las diversas actividades que se organizan y conviértelos en unos auténticos Junior Rangers. También te preguntarás qué itinerario escoger. Todo depende del aeropuerto de llegada y de salida. Nosotros te aconsejamos que ambos aeropuertos sean diferentes, así podrás explorar más paisajes. Podrías por ejemplo llegar a San Francisco y volverte a España desde el aeropuerto de Los Ángeles. Si no te apetece conducir hasta Los Ángeles, siempre puedes hacerlo desde Las Vegas tras haber vivido el desenfreno que se respira en esta tierra de emprendedores. Fíjate bien en los billetes de avión, pues el precio puede variar de una ciudad a otra. Utiliza nuestro comparador para encontrar el billete de avión más barato.
- No te pierdas San Francisco: es una ciudad cuya parada es obligatoria. Pasa allí unos 3 o 4 días y disfruta al máximo. Descubre los mejores lugares de San Francisco.
- Reserva los hoteles que se encuentren en los parques: los kilómetros se pasan rápido gracias a los maravillosos paisajes que te esperan. Para no cansarte mucho, no cambies de hotel todos los días. Además de los kilómetros por carretera, también tendrás que recorrer unos cuantos cuando estés en los parques. Por ello, lo mejor es que elijas bien los hoteles y priorices los que se encuentran en el interior de los parques o cerca de los mismos. Por la mañana, podrás descansar de tanto conducir mientras recorres sus maravillas naturales, y por la tarde, no hay nada mejor que contemplar el juego de luces que forma el paisaje, así como las hermosas puestas de sol. La mayoría de los parques están equipados con zonas de pícnic, donde podrás disfrutar de una buena cena bajo la magia de la noche.
- Reserva algunas actividades con antelación: reserva antes las diversas actividades que más te interesen, pues en verano todo está completo enseguida (visita de Alcatraz, descenso del Cañón del Antílope, alquiler de barco en el lago Powell…). Encuentra aquí todas las actividades que puedes hacer en el oeste americano. Y si deseas descubrir «The Wave», una extraordinaria formación rocosa con forma de ola situada cerca de la ciudad de Page, reza a la diosa Fortuna, pues solo conseguirás una entrada mediante una lotería diaria de 10 pases.
Alquilar un coche en Estados Unidos es muy simple. Solo basta con tener 21 años y una tarjeta de crédito. No necesitas el permiso de conducir internacional, con es europeo es suficiente.
- ¿Qué tipo de coche alquilar? Piensa que deberás hacer muchos kilómetros por carretera, así que lo mejor será que escojas un coche cómodo, con aire acondicionado y un buen maletero, pues en los road trips siempre vas con las maletas para aquí y para allá. Además de poder meter todas tus pertenencias sin problema, un gran maletero es ideal para meter una nevera con hielos, indispensable para meter la bebida en verano. Te recomendamos un SUV, ya que es un coche muy espaciado, y lo agradecerás en algunos lugares como Monument Valley, donde las visitas se hacen en coche sobre un terreno de arena. También te aconsejamos que adquieras o alquiles un GPS, a no ser que ya lo tengas instalado en el móvil. En EE. UU., las cajas de cambios son automáticas. No olvides verificar que el coche está en buen estado antes de adquirirlo. No es obligatorio firmar ningún contrato de seguro, pero te lo recomendamos (unos 14 $ al día). Es un dinero, pero se agradece, pues es muy fácil tener un imprevisto o darse algún golpe en las largas carreteras del oeste americano. Encuentra aquí un coche de alquiler.
- ¿Dónde alquilar un coche? Imagina que llegas a una gran ciudad y deseas quedarte unos días antes de seguir con tu viaje por carretera. En ciudades como San Francisco o Los Ángeles no necesitarás coche. Antes de irte, podrás recuperar tu coche en alguna agencia próxima a tu hotel o albergue. Fíjate bien en los precios, pues muchas veces alquilar un coche en el aeropuerto de llegada es más barato que hacerlo a través de una agencia local. Si te quedas unos días en la ciudad, calcula también el coste del estacionamiento del coche durante ese período.
- ¿Es fácil circular por allí? Las carreteras del oeste suelen ser rectas, están en muy buen estado y son gratuitas
- Resposta con regularidad: No olvides parar a llenar el depósito del coche con regularidad. Puede que te sorprenda, pero puedes encontrarte con kilómetros y kilómetros sin gasolineras, y es muy fácil quedarte sin gasolina en medio de la nada. En cuanto te quede un cuarto de gasolina en el depósito, llénalo.
Encuentra todo lo que necesitas saber en nuestra página COCHE.
¿Un road trip en el oeste americano con niños? ¡Por supuesto! Si no son muy pequeños, el viaje les dejará recuerdos inolvidables. Los parques nacionales proponen cuadernos a los niños mayores de 4 años. Disponibles en todos los Visitor Center, estos «Junior Ranger Handbook» presentan el parque y sus características, y están hechos para sensibilizar a los más jóvenes sobre la riqueza de la naturaleza y la importancia de cuidarla y protegerla. Con el cuaderno en la mano, tus hijos podrán descubrir el parque y responder a las diversas preguntas que se les plantea. Al final de la visita, si han respondido correctamente a las preguntas, ganarán la placa oficial de Junior Ranger. Pueden coleccionar los Junior Ranger de los diversos parques y convertirse en los auténticos jefes del lejano oeste.
Lleva cuidado en algunos parques, ya que carecen de vallas y protección y puede ser peligroso para los más aventureros de la casa.
- Electricidad: los enchufes en América no son compatibles con los nuestros. Cómprate adaptadores para tener acceso a la electricidad.
- Teléfono: consulta a tu operador para saber cuáles son las posibilidades que tienes de llamar y enviar mensajes desde EE. UU. Algunos operadores las incluyen en su tarifa, pero otras no, por lo que deberás adquirir un Pass USA incluso para poder conectarte a Internet. La conexión puede ser importante, sobre todo a la hora de utilizar el GPS cuando alquiles el coche.
- Internet: la mayoría de los hoteles ponen a disposición de sus clientes wifi gratis, aunque en algunos sitios puede ir muy lento.
- GPS: es indispensable para recorrer las carreteras de Estados Unidos. Si tienes conexión a Internet, no hará falta que te hagas con ningún GPS. Cuidado, en algunos parques el GPS no funciona correctamente o directamente no va.
Esta es la pregunta que más nos hacemos cuando preparamos nuestro viaje. Algunos prefieren la libertad y la naturaleza que brinda la autocaravana, mientras que otros optan por las comodidades de un hotel.
Económicamente hablando, te sorprenderá saber que no hay tanta diferencia entre estas dos posibilidades. Si eliges el hotel, te gastarás más en estancia y comida. Sin embargo, con la autocaravana podrás hacer la compra en el supermercado, y la estancia es más barata. Pero claro, lo que te gastas en gasolina compensa lo que te ahorras en el hotel.
Como los precios son muy similares, tienes que mirar el lado práctico: la autocaravana es ideal si deseas una estancia cerca de los parques. Podrás disfrutar de unas vistas maravillosas al atardecer en los lugares más espectaculares del mundo, hacer una barbacoa en plena naturaleza y observar animales en su hábitat. Los hoteles no suelen estar cerca de los parques, donde tendrás todo el confort posible pero no las vistas que brinda el paisaje del camping. El desayuno en los hoteles, sobre todo en verano, no tiene nada que ver con la tranquilidad que se respira en medio de la naturaleza. Las comidas en los restaurantes de la ciudad, por supuesto, también hay que pagarlas. Eso sí, en el hotel no perderás tiempo yendo al supermercado, llenando la nevera con bebida y preparándolo todo tú.
Ahora que ya tienes una ligera idea de las dos opciones, elige la que más te convenga.
Los outlets son grandes centros comerciales que agrupan una centena de tiendas de marca como Nike, Levi’s, Ralph Lauren o Converse. Generalmente, abren hasta las 21 h. La ventaja es que suelen proponer descuentos de entre un 25 y un 60 % de descuento en artículos de fin de temporada y de años anteriores. Cuidado, ten en cuenta que una vez en caja, se añadirá al precio de los artículos un impuesto que varía dependiendo del estado (7/8 %). En las grandes ciudades encontrarás estos grandes almacenes: Los Ángeles, San Francisco, Las Vegas, etc. En las Vegas encontrarás dos grandes outlets fácilmente accesibles: Las Vegas Premium Outlets North y Las Vegas South Premium Outlets.
Fíjate bien en aquellas marcas en las que la compra te salga rentable teniendo en cuenta la comisión que cobra tu banco por utilizar la tarjeta en el extranjero.
Es imposible quedarse con uno, pues cada cual es diferente y posee un encanto particular. Entre la enorme falla del Gran Cañón, las chimeneas de piedra roja del Cañón de Bryce, las impresionantes paredes del Parque Zion, los géiseres de Yellowstone, los arcos de Moab, las dunas de arena del Valle de la Muerte o las espectaculares colinas de Monument Valley, tu viaje estará repleto de hermosos paisajes y momentos mágicos vayas donde vayas. Bueno, a decir verdad, Allavamos.com tiene sus preferencias, claro. Personalmente, nos quedamos con el Bryce Canyon National Park. En cuelquier caso, también te aconsejamos que adquieras el Interagency annual pass, un pase que cuesta 80 dólares y que te da acceso a todos los parque nacionales. Lo puedes adquirir en cualquier parque una vez allí. Eso sí, el pase no cubre los monumentos que se encuentran bajo control de la tribu de los Navajos, como es el caso del Monument Valley, que vale 20 dólares.
Evita las oficinas de cambio de moneda de los aeropuertos, que pueden cobrar una importante comisión. Para cambiar de divisa, los bancos son la mejor solución. No cambies mucho dinero, pues la mayoría de las compras las harás por tarjeta. Ten en cuenta que el banco te cobrará una comisión del 2 % aproximadamente cada vez que realices un pago por tarjeta o saques dinero del cajero. Otras tarjetas de crédito estiman un límite de euros sin cobrarte comisión desde el extranjero. Infórmate bien en tu oficina bancaria.
- Sus impresionantes parques nacionales, como el Gran Cañón o el Bryce Canyon,
- San Francisco y su Golden Gate.
Si tienes pensado visitar varios parques nacionales, la opción más económica es adquirir la Interagency Annual Pass, también llamada America The Beautiful. Por 80 $ podrás entrar en todos los parques nacionales de manera ilimitada durante un año. La puedes utilizar en el Gran Cañón, Zion, Canyolands, los Arcos y muchos otros. La entrada sin el pase puede variar entre los 15 y los 30 $. Haz el cálculo, pues normalmente el circuito incluye 5 parques nacionales, en cuyo caso el pase sale barato. Podrás comprarlo en la entrada de cada parque o en los Visitor Center.
Si ya has visitado un parque y lo adquieres después, no te preocupes. Presentando el ticket de esa primera visita en el Visitor Center, te descontarán el importe a la hora de pagar el pase.
En los parques que se encuentran en territorio Navajo, como el Monument Valley o el Cañón del Antílope, el pase no es válido.
- La gran distancia que hay entre cada ciudad, que supone kilómetros y kilómetros de carretera. - Las altas temperaturas del verano, que pueden hacer que los recorridos por los parques se hagan agotadores. - El turismo en verano. Reserva todas las actividades con antelación.
Te sorprenderá saber que en 10 años la presencia de españoles en Estados Unidos ha aumentado más de un 500 %, gracias en parte a la mejora en el desarrollo de las compañías aéreas que viajan desde España. Cada vez, las compañías aéreas proponen precios baratos para cruzar el charco, y las agencias hacen todo lo posible para promover este destino.
Antes de reservar, planea bien tu recorrido. ¿Qué lugares y ciudades te gustaría visitar? ¿De cuánto tiempo dispones para hacer tu road trip? Lo mejor es que te hagas un planning con las ciudades de llegada y de salida cada día. No hace falta que hagas un circuito redondo, puedes por ejemplo salir de San Francisco y terminar en Los Ángeles o Las Vegas. De esta manera, podrás cambiar de aeropuerto de ida y vuelta, y los billetes puede que sean más baratos. Cuando hagas el planning, evita también cambiar de ciudad todos los días, ya que la distancia entre los distintos lugares es bastante grande (entre 2 y 4 horas en carretera), y terminarás aborreciendo el viaje. Quédate al menos 2 o 3 días en las ciudades más grandes y 1 o 2 en los parques que se pueden visitar en un día (Death Valley o el Monument Valley), e incluso más en los más grandes, como el Gran Cañón, Yosemite o Zion, sobre todo si te gusta caminar, pues ofrecen muchísimas excursiones.
Tómate tu tiempo y no tengas prisa, organiza la estancia según tus gustos y la distancia entre los distintos lugares que quieres descubrir.
Una vez hecho, empieza a reservar. Lo primero que tienes que comprar son los billetes de avión. Una vez tengas claras las fechas de ida y vuelta, puedes reservar los distintos hoteles. Si viajas en julio o agosto, te recomendamos que hagas tu reserva con 6 meses de antelación para que puedas encontrar hoteles cerca de los parques. A continuación, será el turno de las actividades. No esperes a comprar las entradas o pagar las distintas actividades una vez allí. Verás que depende también de lo que quieras hacer. En San Francisco, por ejemplo, para visitar la prisión de Alcatraz o el Cañón del Antílope hay que reservar con varios meses de antelación, pero no hará falta que hagas nada si deseas dar una vuelta en bici por el Golden Gate. En Las Vegas, no olvides buscar algún espectáculo típicamente americano. Por último, toca el coche. Con 1 mes o 2 de antelación será suficiente.
Por supuesto, te recomendamos que lo hagas antes de irte. Nadie se salva de un posible esguince mientras caminas, de una maleta extraviada o de un accidente con la autocaravana o el coche. Son cosas que no se pueden controlar. En Estados Unidos, una consulta al médico si importancia puede costar entre 100 y 1000 $. Pagando por adelantado los posibles gastos, el seguro te permite que una simple consulta no te cueste un ojo de la cara. Normalmente, estos seguros incluyen gastos médicos, de repatriación, hospitalización, cancelación de vuelo y pérdida de equipaje.
Cuando todo esté reservado y la fecha del viaje se acerque, será hora de hacer la maleta. Antes de llenarla de ropa, elige una maleta que no sea muy pesada y que sea fácil de transportar. ¿Por qué? Simplemente porque durante tres semanas irás de ciudad en ciudad y de hotel en hotel, y será un gran engorro ir con una maleta pesada de aquí para allá. Evita también llevarte todo el armario. Cuando hayas elegido la que más te convenga, prioriza calzado cómodo, protección solar y una gorra. No olvides adquirir adaptadores eléctricos, una nevera para mantener la bebida fresca y el planning que has hecho para organizar bien el viaje.
En las grandes ciudades no tendrás ningún problema para comer equilibrado. En los parques, sin embargo, no es raro encontrar hamburgueserías, aunque hay que buscar un poco para encontrar más posibilidades. Hay muchos restaurantes mexicanos que ofrecen platos más sanos, a no ser que elijas patatas fritas con salsa picante de aperitivo. Si quieres evitar los restaurantes, siempre puedes ir al supermercado y comprarte lo que desees si quieres hacer un pícnic. No olvides la nevera para mantener fresco todo lo que compres, a no ser que te alojes en un hotel, donde seguro que habrá frigorífico en la habitación. En cuanto al presupuesto, las comidas son una parte muy importante del viaje, ya que todo es caro. Para que la tarjeta no llore, intenta comprar en los supermercados para que te salga más barato, como es el caso de las botellas de agua.
Este viaje está hecho para los viajeros con buena forma física, ya que los parques del oeste americano requieren horas de camino. Muchas de sus rutas pueden hacerse entre varios minutos y algunas horas. Eso sí, vale la pena hacerlos para descubrir la belleza de sus paisajes. Prepárate antes de venir y evitar que el calor del verano, los largos kilómetros y los cambios diarios de hotel no te agoten durante tu estancia en América.
Si viajas en verano, reserva con tiempo los hoteles, pues los que están cerca de los parques se llenan enseguida, al igual que ocurre para realizar algunas actividades (Cañón del Antílope, The Wave, vuelta en helicóptero por el Gran Cañón, espectáculos en Las Vegas o visita a la prisión de Alcatraz).
- Olvidar hacer la solicitud ESTA
- Prever demasiados kilómetros por día,
- Comenzar tu road trip nada más llegar del aeropuerto. Tras 12 horas de vuelo, lo más aconsejable es que te quedes en la ciudad de llegada unos días para poder circular cuando hayas descansado.
- Cambiar de hotel cada día. Te vas a cansar muy rápido. Te recomendamos que te quedes 2 o 3 días en cada ciudad y en algunos parques,
- Esperarte mucho tiempo para reservar hoteles y actividades. Si no lo haces con antelación, puede que ya no puedas hacerlo luego, pues en verano se llena todo enseguida,
- No prepararse físicamente, sobretodo los que no están acostumbrados a hacer deporte. Durante este viaje, tendrás que caminar mucho, y el terreno no siempre es plano,
- No ahorrar antes de irte de viaje. Comida, gasolina, alquiler, hotel, actividades... Calcula bien el presupuesto antes de irte.
- La diferencia horaria entre las distintas zonas y estados. Lleva cuidado si has reservado alguna actividad en una zona cuyo horario sea diferente. Por ejemplo, si te encuentras en Utah y vas a visitar el Cañón del Antílope, ten en cuenta que la hora en la que debes fijarte es en la de Arizona. De la misma manera, si caminas por el Rim Trail (Gran Cañón) verás como en cualquier momento la hora de tu teléfono se cambiará.
- No repostar con suficiente regularidad. Puedes estar recorriendo kilómetros y kilómetros en medio de la nada y no encontrarte ninguna gasolinera. No te esperes al último momento para rellenar el depósito. En julio y agosto, las temperaturas oscilan entre los 35 °C y los 40 °C en los parques y hasta 50 °C en Death Valley. No olvides comprar también agua,
- Bañarte creyendo que estás en Benidorm. Te sorprenderá saber que las aguas de las playas de San Francisco no superan los 15 °C en pleno verano,
- No asegurarte en invierno de que el acceso a los diferentes parques está abierto, pues en ocasiones la nieve provoca el cierre de las carreteras,
- Entrar a un pub o casino con tus hijos si tienen menos de 21 años.
Cuando prepares tu viaje por el oeste de Estados Unidos es normal que te preguntes cuáles son las mejores ciudades que puedes visitar. San Francisco es una parada obligatoria, y Las Vegas se encuentra entre varios parques, por lo que pasarás por allí necesariamente. Pero, ¿vale la pena visitar Los Ángeles?
Para los amantes del cine, Los Ángeles sigue siendo una parada obligatoria que se completa con una visita a los estudios Warner Bros, Paramount o Universal Studios. Puedes hacer una visita guiada en tren o microcar por las falsas calles que han servido de decorado a algunas de tus películas y series favoritas. Además, conocerás algunas de las anécdotas sobre actores y rodajes. Cuando nombramos los Ángeles, no podemos dejar de pensar en sus inmensos atractivos. La ciudad no siempre cuenta con red de transportes en todos sus barrios, y necesitarás sí o sí el coche para recorrer sus concurridas calles.
Si debemos nombrar algunos aspectos negativos, puede que recorrer las calles en coche no sea de tu agrado. Además, la ciudad presenta un gran contraste de clases, con impresionantes mansiones y numerosos sintechos. Venice Beache está repleto de tiendas de recuerdos de mala calidad, y el paseo de la fama de Hollywood cuenta con un suelo en ocasiones sucio y mal frecuentado.
A no ser que seas un incondicional del cine, puede que los Ángeles no sea un destino que debas incluir cuando planees tu road trip.